Conocí el molino por el campamento anual de la primaria montessori Irapuato y fue una de las mejores experiencias de mi vida, los talleres eran muy divertidos como biología, telar, papel de maíz, joyería, música, sombreros, Entre muchas otras, cuando íbamos los de Irapuato siempre nos juntaban con los chicos del montessori de san Jerónimo D.F. Ellos lo hacían aún más espacial porque convivíamos, compartíamos cosas e historia y nos hacíamos amigos y comíamos guntos. Recuerdo que había una cancha de futbol entre la entrada principal y las cabañas en la cual algunas beses en las mañanas los guías nos (...)