La difícil situación de nuestros océanos se refleja en las poblaciones de peces bajo presión, la acidificación impulsada por el cambio climático y la marea creciente de contaminación plástica.
Y aunque todos estos factores están envenenando nuestros océanos, existen muchas medidas que podemos tomar parar combatir los factores contaminantes y minimizarlos.
El aumento de las presiones por la pesca excesiva y la contaminación ha provocado llamamientos a la acción para restaurar lugares marítimos magníficos que alguna vez fueron oasis cristalinos.
El desafío es que los problemas marinos no han sido una prioridad para los gobiernos locales y centrales, y muchas personas nunca han explorado más allá de la costa ni se han sumergido bajo la superficie para ver la riqueza de la biodiversidad marina y la degradación que se está produciendo.
Nuestro sesgo terrestre ha significado que hay un sentido de "ceguera del océano"; una incapacidad para que la mayoría de la gente vea debajo de la superficie. Para curar la ceguera del océano, necesitamos hablar sobre el océano y los desafíos que enfrenta.
Y, para reducir nuestro impacto en el océano y restaurar estos fantásticos entornos marinos, todos tenemos un papel que desempeñar. Hay que recordar que el océano y la atmósfera están fuertemente vinculados, e intercambian calor y gases todo el tiempo a través del viento.
El océano regula el clima y actúa como un disipador de calor, absorbiendo el 93% del calor global de la atmósfera. A medida que las aguas se calientan y las corrientes oceánicas cambian, los animales y las plantas pueden migrar hacia el sur (en el hemisferio sur), dando como resultado hábitats modificados o perdidos. Si queremos proteger el clima, debemos proteger el océano.
Así que, mientras estés disfrutando del mar, aquí algunas medidas que puedes hacer para reducir tu impacto en el océano.
Según las tasas previstas, habrá más plástico que peces en el mar para el año 2050.
Cada año, 100,000 mamíferos y tortugas marinas y 1 millón de aves marinas mueren a causa de la contaminación plástica marina; gran parte de ese plástico se lava en el mar desde las costas
Las precipitaciones recogen plásticos, aceites de motor, metales pesados y otros contaminantes de las carreteras y desagües, y los llevan al mar.
Una vez ingeridos, los plásticos permanecen en el intestino del animal, y los contaminantes pueden acumularse en los animales hasta niveles tóxicos, lo que resulta en la muerte.
Para reducir el riesgo de que el plástico salga al mar, puedes rechazar y reducir el uso de plástico (use bolsas reutilizables, empaques de plástico, pajitas y bolsas, no compre trucos de plástico).
Cuando laves tu automóvil, intenta dejar que el agua pase a través del suelo en lugar de limpiar el desagüe.
Los altos volúmenes de sedimentos impactan los ambientes costeros y estuarios al reducir los niveles de luz, enterrar las hierbas marinas, obstruir los alimentadores de filtro y reducir el éxito de la alimentación de peces juveniles como el pargo.
Para reducir la sedimentación y mejorar la calidad del agua, las vías fluviales pueden protegerse a través de plantaciones ribereñas, cercas y conservación de manglares.
Potencialmente, cientos de toneladas métricas de protector solar ingresan al océano cada año, muchos de los cuales contienen sustancias químicas que se sabe que eliminan las algas. Los arrecifes de coral dependen de estos para el sustento. Los filtros solares también blanquean los corales. Así que cambia a un protector solar biodegradable y amigable con el océano que sea mejor para ti y para el ecosistema del océano.
Cada año, Ocean Conservancy organiza la limpieza costera internacional. Este evento global les pide a los voluntarios recolectar plástico y otros desechos de las áreas costeras y vías fluviales. También se brinda un kit de herramientas de bricolaje para ayuda a organizar limpiezas en comunidades locales y para realizar un seguimiento de los esfuerzos de limpieza.
Si te unes a los esfuerzos de limpiar los océanos, puedes realizar un seguimiento y compartir tu progreso en las redes sociales y enviar tus datos directamente a la base de datos global de basura del océano para ayudar a apoyar el esfuerzo.
Debemos evitar comprar productos y suvenires que exploten la fauna marina. Estos productos pueden contribuir a dañar los arrecifes de coral y las poblaciones marinas:
Joyas de coral Accesorios para el cabello de carey Accesorios hechos de estrellas de mar y conchas Productos hechos de cartílagos de tiburón Conchas de Nautilo Conchas de tortuga marina
Aún y cuando seamos amantes de las mascotas, a veces no nos damos cuenta de cómo cuidarlos, alimentarlos y limpiarlos y eso puede tener un impacto en el medio ambiente. Aquí hay algunas maneras en que puedes ser un dueño de mascotas más amigable con el medio ambiente y con el océano:
Lee las etiquetas de los alimentos para mascotas y considera qué tan sostenible es su dieta. Nunca enjuagues la arena para gatos, ya que puede contener patógenos dañinos para la vida marina. Nunca sueltes peces de acuario u otras criaturas marinas en océanos, ríos u otros cuerpos de agua. Se arriesga a introducir especies no autóctonas perjudiciales para los ecosistemas existentes. No compres peces vivos de agua salada capturados en la naturaleza para tu acuario. Asegúrate de elegir la vida marina que adquieras de forma segura y sostenible.
Comentarios sobre Reducir y cuidar nuestros ya dañados océanos, es una responsabilidad de todos
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