En las faldas de la mítica zona arqueológica de Teotihuacán, en el Estado de México, se encuentra un rincón de alegría y frescura que transforma el calor del Valle de México en momentos inolvidables: el Centro Recreativo Pascual, también conocido como Balneario Pascualitos o Pascual Boing. Ubicado en Curva la Garita s/n, Atlatongo, código postal 55823, Teotihuacán de Arista, Méx., este parque acuático es un oasis familiar accesible para quienes buscan combinar aventura, deporte y descanso.
A solo 45 minutos de la Ciudad de México por la autopista México-Pirámides, Pascualitos invita a desconectarse rodeado de historia ancestral y naturaleza vibrante. Sus chapoteaderos con agua tibia, a unos 30-35 grados Celsius, no solo refrescan en días soleados, sino que ofrecen un toque terapéutico gracias a sus minerales naturales, convirtiendo cada visita en un bálsamo para el cuerpo y el espíritu.
Un Legado de Diversión en la Sombra de las Pirámides
Teotihuacán de Arista, cabecera municipal del Valle de Teotihuacán, es un mosaico de herencia prehispánica y modernidad, donde las imponentes Pirámides del Sol y la Luna dialogan con comunidades como Atlatongo. Este centro recreativo, fundado en la década de 1970 por la Sociedad Cooperativa Trabajadores de Pascual —la emblemática marca de jugos—, surgió como un beneficio para empleados, pero rápidamente se abrió al público general. Hoy, con más de 50 años de historia, Pascualitos atrae a miles de familias mexicanas, especialmente en temporadas altas como Semana Santa o verano, cuando el termómetro invita a sumergirse en sus albercas. Su temática juguetona, inspirada en personajes como el pato Pascual o la fresa Lulú, añade un encanto nostálgico que evoca infancias dulces, mientras el entorno boscoso contrasta con el paisaje semiárido circundante.
Acceso Fácil y Bienvenida Cálida
Llegar a Pascualitos es tan sencillo como emocionante: el enlace de Google Maps https://maps.app.goo.gl/rnr5GUUqDGCZQviu9 guía directamente al sitio, con amplio estacionamiento gratuito para autos y autobuses. Abierto de martes a domingo y días festivos, de 9:00 a.m. a 5:00 p.m., permite jornadas completas bajo el sol teotihuacano. La entrada general es accesible: 150 pesos para adultos, 120 pesos para niños y adultos mayores, con gratuitad para menores de un metro. Estos costos incluyen acceso ilimitado a todas las instalaciones acuáticas y deportivas, aunque extras como renta de palapas o asadores se pagan aparte. Regaderas de agua fría, vestidores y salvavidas atentos aseguran comodidad, y se permite ingresar alimentos y bebidas de la familia Pascual, fomentando picnics caseros.
Atracciones Acuáticas para Todos los Gustos
El corazón de Pascualitos late en sus aguas: cuatro albercas al aire libre de profundidades variadas, desde zonas someras para principiantes hasta piscinas profundas para nadadores expertos, alimentadas por manantiales locales que mantienen un flujo constante y limpio. Los tres chapoteaderos con agua tibia son el paraíso infantil, equipados con chorros suaves y juguetes flotantes que provocan carcajadas interminables. Para los amantes de la velocidad, múltiples toboganes serpentean desde torres coloridas, ofreciendo descensos refrescantes que terminan en chapuzones eufóricos. Imagina a los más pequeños explorando estas rampas seguras, mientras los mayores compiten en carreras acuáticas, todo bajo la vigilancia experta del staff.
Deportes y Áreas Verdes para Activar el Cuerpo
Pascualitos trasciende lo acuático con una oferta deportiva robusta, ideal para equilibrar el relax con la energía. Cuenta con canchas multifuncionales de básquetbol, fútbol rápido, soccer, voleibol de playa y frontón, además de una pista de tenis para partidos competitivos. Estas instalaciones, rodeadas de áreas verdes frondosas, fomentan torneos familiares o amistosos, con alquiler de equipo disponible en el minisúper del lugar. Las palapas sombreadas y asadores permiten barbacoas al aire libre, donde el aroma de carnes asadas se mezcla con el cloro purificado, creando memorias olfativas tan vívidas como las visuales. Para los exploradores, senderos peatonales invitan a caminatas cortas, conectando con la esencia natural de Atlatongo.
Las Virtudes Terapéuticas de sus Aguas
Aunque no tan volcánicas como otras termales hidalguenses, las aguas de Pascualitos brotan de acuíferos locales ricos en minerales como calcio y magnesio, ofreciendo beneficios sutiles pero palpables. Sumergirse en los chapoteaderos tibios alivia tensiones musculares, mejora la circulación y calma afecciones cutáneas menores, según relatos de visitantes habituales. En una región marcada por la actividad geotérmica —cercana a fallas que alimentan sitios como Ixmiquilpan—, estas piscinas actúan como un spa accesible, promoviendo el bienestar sin pretensiones de lujo. Estudios regionales destacan cómo tales manantiales, con pH equilibrado, contribuyen a reducir el estrés oxidativo, posicionando a Pascualitos como un aliado natural en el ajetreo metropolitano.
Opciones de Hospedaje y Estancias Prolongadas
Para quienes desean extender la diversión, Pascualitos ofrece áreas de acampado amplias con acceso a baños, regaderas y enchufes, por unos 200-300 pesos por noche por sitio, perfecto para tiendas familiares. Aunque no cuenta con hotel propio, su proximidad a Teotihuacán facilita pernoctaciones en opciones cercanas como Villas Arqueológicas o El Quinto Sol, con tarifas desde 1,500 pesos la noche e integración de termas. El centro es ideal para eventos: bodas, XV años o reuniones corporativas se montan en sus salones al aire libre, con capacidad para cientos y menús personalizados. Esta versatilidad lo hace un hub para escapadas de fin de semana, fusionando recreación con la mística teotihuacana.
Sabores Regionales en su Restaurante
La gastronomía eleva la experiencia: el restaurante on-site sirve platillos mexicanos reconfortantes como tacos al pastor, enchiladas y guisados de la zona, acompañados de aguas frescas —por supuesto, Pascualitos en sabores frutales—. Precios amigables (platos desde 100 pesos) incluyen opciones vegetarianas y kid-friendly, como hot dogs o quesadillas. El minisúper complementa con snacks, bebidas y productos Pascual a precios bajos, incentivando compras impulsivas. Reseñas en plataformas como Google y Facebook promedian 4.3 estrellas, elogiando la limpieza, el servicio cálido y la frescura, aunque algunos sugieren mejoras en el mantenimiento de toboganes durante picos turísticos.
Inmersión Cultural en los Alrededores
Visitar Pascualitos es puerta de entrada a un tapiz cultural: a solo 4 km, las Pirámides de Teotihuacán despiertan con caminatas al amanecer, mientras el Museo de Murales Beatriz de la Fuente revela secretos prehispánicos. Cerca, el Restaurante La Gruta ofrece cenas con shows folklóricos en cuevas iluminadas por antorchas. Festivales locales, como la Feria de Teotihuacán en marzo, añaden danzas y artesanías nahuas. Para llegar, toma la salida Pirámides desde la México-Pachuca y sigue señales a Atlatongo; el tráfico es manejable fuera de horas pico.
Un Escape Energizante en 2025
En un calendario saturado, el Centro Recreativo Pascual reafirma el valor de lo simple: un chapuzón compartido, un partido improvisado o un atardecer en alberca. Ya sea por sus toboganes vertiginosos o sus aguas curativas, este rincón promete rejuvenecimiento accesible. Para reservas o dudas, contacta al +52 594 956 0297. En 2025, con su encanto intacto, Pascualitos sigue siendo el complemento perfecto a la grandeza teotihuacana: un sorbo de diversión en el Valle de los Dioses.











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